La fotografía ha formado parte de mi vida desde que alrededor de los 10 años perseguía a mi hermano hasta su cuarto oscuro de revelado y presenciaba la liturgia de la Magia.
Creo que mi primera cámara fue una Agfamatic 3008 pocket que recibí como regalo de cumpleaños. Casi diez años más tarde, la primera réflex que abrió mis ojos a un mundo nuevo fue una Praktica super TL1000 que conservo aún hoy en día. Después hubo varias compactas (primero analógicas, después digitales) hasta llegar a mi primera réflex digital, una Canon EOS 450D. La última incorporación a la familia ha sido la maravillosa Canon EOS 7D a la que yo llamo el Sr. 7D por su contundencia física.
Soy fotógrafa autodidacta, intento aprender y mejorar mi técnica cada día, teniendo siempre presente la máxima taoista que afirma que en última instancia, una vez aprendida, dominada e interiorizada la técnica, hay que olvidarla y dejarse llevar, símplemente fluir.
"Ultimately, you must forget about technique. The further you progress, the fewer teachings there are. The Great Path is really NO PATH"
Ueshiba Morihei
Me gustaría ser algo más que una simple "tomadora de imágenes". Intento tomar fotos poniendo en cada una de ellas mi corazón, e intento capturar en ellas el alma de aquello que fotografío. El diálogo entre el fotógrafo y el fotografiado es como una pequeña amistad, como una pequeña historia de amor. Es por ello que me tomo mi tiempo para construir esa relación, para conocernos, para tomar confianza el uno con el otro, para llegar a ese estado mental en que todo fluye naturalmente. Quizás eso no parezca (o no sea) muy "profesional", pero para mi es como debe ser.
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